Un grupo de desconocidos, que podrían ser extremistas judíos, quemaron esta madrugada la puerta de la abadía trapense (católica) de Latrún, ubicada cerca a Jerusalén, y dejaron algunas pintas blasfemas escritas en hebreo.
Según señala la agencia Efe, los monjes católicos se despertaron en la madrugada y encontraron la puerta de la entrada en llamas, y vieron unos graffitis escritos en hebreo en donde se leía "Jesús es un burro" y "Ramat Migrón", en referencia a la colonia judía en el territorio palestino ocupado de Cisjordania desalojada el domingo por las autoridades israelíes.
Tras el ataque, señala la BBC, la policía de Israel ha puesto en marcha una investigación para dar con los responsables del atentado al monasterio ubicado en territorio palestino a unos 15 kilómetros de Jerusalén.