30 de agosto de 2006 / 01:26 PM
La Iglesia y el mundo necesita de jóvenes que "escuchen y respondan" a la llamada del Señor y para ello es necesario "proponerles sin miedo la vida cristiana en clave de santidad", aseguró el Obispo de Tarazona, Mons. Demetrio Fernández González, con ocasión de la Misa por la celebración del traslado de las reliquias de San Atilano, el joven turiasonense del siglo IX que a los 15 años de edad decidió seguir su vocación monástica.
Al constatar la generosidad de los jóvenes de hoy, el Prelado dijo en su homilía que a estos "hemos de proponerles sin miedo la vida cristiana en clave de santidad" constatando que las actuales propuestas a las "borracheras, drogas, sexo sin freno" es un "insulto" pues ellos "son capaces de mucho más".
En este sentido, Mons. Fernández propuso como ejemplo "ejemplo para los jóvenes de todos los tiempos" al santo que desde su juventud escuchó y siguió el llamado de Dios. Es un modelo de "búsqueda de Dios, del sentido de la vida, de la búsqueda de hacer el bien a los demás", dijo.