La Comisión de Migraciones y Turismo del Episcopado argentino, reunida en la ciudad de Mendoza, emitió un enérgico documento en el que denuncia que la nueva política europea contra los inmigrantes es una duro golpe a los derechos humanos.
El documento, titulado "He visto el dolor de mi pueblo", critica en general el endurecimiento de la política migratoria europea, que prevé la expulsión de ciudadanos latinoamericanos sin papeles del continente, y repudió la trata de personas, a la que consideró una "gravísima violación de los derechos humanos".
Los delegados episcopales advirtieron que "no se puede callar el sufrimiento de tantos hermanos y hermanas nuestros, especialmente mujeres y niños que padecen esta inhumana esclavitud, que es una gravísima violación a los derechos humanos".