Gracias a la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) de Reino Unido, 450 de los ancianos pobres que residen en Alepo (Siria) recibieron nuevos pares de zapatos, bienes que no podían conseguir debido a la inflación y la crisis económica originada por la guerra civil.
Según informó ACN Reino Unido, los beneficiados tienen entre 60 y 70 años y "la mayoría viven solos y no tienen ingresos para cubrir sus necesidades más básicas".
La hermana Annie Demerjian, que participó en el proyecto, indicó que "estoy muy feliz porque estos ancianos tengan zapatos calientes ya que no tienen calefacción en sus habitaciones o trabajan en la calle".