Cada 24 de junio el calendario litúrgico de la Iglesia Católica recuerda el nacimiento de San Juan el Bautista, hijo del sacerdote judío Zacarías y de Santa Isabel, la prima de la Virgen María que vivía en Ein Karem (Jerusalén) en donde el santo nació a los seis meses antes de Jesús.
San Juan el Bautista, es el único santo cuya fecha de nacimiento es celebrada. El anuncio de su nacimiento fue hecho por un Ángel enviado por Dios a su padre Zacarías que no podía tener hijos porque Isabel era estéril y ambos ya eran muy mayores, como lo relata el Evangelio de San Lucas en su primer capítulo.
La Virgen María al saber del Ángel Gabriel que su prima estaba embarazada, decidió viajar hacia Ein Karem para cuidarla, es ahí donde San Juan salta de alegría en el vientre de su madre al escuchar el saludo de María, porque acababa de recibir la gracia del Espíritu Santo al contacto del Hijo de Dios que llevaba en el vientre. Desde ese momento el Juan fue santificado.