El Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona (España), cuyo patronato integran el Arzobispado de Barcelona, la Generalitat y el Ayuntamiento, informó que ya no practicará abortos voluntarios, "pero sí aquellos en los que haya peligro para la madre, por ejemplo".
Según informó este viernes el diario ABC, la dirección del hospital emitió un escueto comunicado en el que afirma que nunca se ha "pedido la acreditación como centro autorizado" para practicar abortos, aunque estos sí se han realizado, tal como consta en el registro de Sanidad.
El hospital informó que la "dirección ha tomado las medidas oportunas para que no se lleven a cabo interrupciones voluntarias del embarazo en este centro, garantizando en todo momento a la ciudadanía el cumplimiento de la legalidad vigente".