3 de abril de 2007 / 02:56 AM
La hermana Marie Simon Pierre, la religiosa francesa que se curó del Parkinson tras rezar junto con su comunidad pidiendo la intercesión del Siervo de Dios Juan Pablo II, cuyo caso es estudiado para la beatificación del recordado Pontífice, dijo que "con la fe todo es posible", al hablar de su repentina curación.
En entrevista concedida a Radio Vaticano, la religiosa comentó que "las palabras no son lo suficientemente fuertes para decir lo que realmente ha pasado. Seguramente es una gran gracia. He sentido una gran paz interior, algo que me ha recorrido todo el cuerpo, una especie de ligereza, me sentía ligera, distinta, totalmente otra. Momentos después he sentido una atracción hacia la adoración del Santísimo. Como religiosa, tenía ya la práctica de la adoración y la Eucaristía cotidiana. Ha sido un momento fuerte. Ha sido en realidad en medio de la noche cuando he sentido la necesidad de ir a rezar frente al Santísimo Sacramento".
Al comentar la experiencia de haber rezado con toda su comunidad pidiendo la intercesión del recordado Pontífice, la hermana señaló que "todas mis pequeñas hermanas rezaban, era la Congregación entera la que oraba. Por tanto, éramos parte de la comunión de los santos, con todos aquellos que están en el Cielo".