El Gobierno del Distrito Federal se comprometió a resguardar la seguridad de la Catedral Metropolitana, así como la integridad de los feligreses y del clero, de posibles ataques como el ocurrido el domingo 18 de noviembre que propició el cierre del templo.
En ese sentido, el presidente del Colegio de Abogados Católicos, Armando Martínez, afirmó que este primer acuerdo entre la Arquidiócesis y el gobierno local incrementa las posibilidades de una pronta apertura de la Catedral. Sin embargo, señaló que serán los obispos locales quienes dirán si se abre o no nuevamente el templo.
Martínez reconoció la "voluntad política" de las autoridades para dialogar "más allá de las diferencias ideológicas" entre las partes. El gobierno, dijo, "sabe actuar y responder sensiblemente a las necesidades de sus gobernados, en la tesitura de garantizar políticas públicas en las que se marca tolerancia y respeto a los demás", porque así se "salvaguarda la libertad de culto".