En un mensaje enviado al Director General de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Jacques Diouf, el Papa Benedicto XVI resaltó que "garantizar a las personas y a los pueblos la posibilidad de acabar con el azote del hambre significa asegurarles un acceso concreto a una alimentación sana y adecuada".
En el texto con motivo de la celebración, este 16 de octubre, de la Jornada Mundial de la Alimentación, que conmemora la fecha de fundación de ese organismo en 1945 y cuyo tema es "Conseguir la seguridad alimentaria en tiempos de crisis", el Santo Padre señala que "la crisis actual que atraviesa sin distinciones el conjunto de los sectores de la economía afecta gravemente en particular al mundo agropecuario, donde la situación es dramática y llama a los gobiernos y a los diversos miembros de la comunidad internacional a tomar decisiones significativas y eficaces".
El mensaje del Papa, dado a conocer hoy con fecha 8 de octubre, indica demás que "garantizar a las personas y a los pueblos la posibilidad de acabar con el azote del hambre significa asegurarles un acceso concreto a una alimentación sana y adecuada. Se trata de una manifestación concreta del derecho a la vida que, si bien se proclame solemnemente, a menudo está muy lejos de ponerse en práctica".