Funcionaria dependiente del Episcopado brasileño defiende y promueve el aborto

Bernardete Aparecida Ferreira, coordinadora de Pastoral de la Mujer Marginalizada (PMM), ente dependiente del Episcopado brasileño, escribió y distribuyó una declaración en la que defiende y promueve el aborto.

Según informa el diario "O Estado de Sao Paulo" en su edición on line, "pese a que indicó que se trataba de una opinión personal, (Ferreira) generó controversia entre los obispos de la Comisión Episcopal Pastoral y Servicio a la Caridad, Justicia y Paz, a la que está subordinada".

Ferreira, quien trabaja con mujeres dedicadas a la prostitución desde hace 17 años, señala que "las mujeres que se prostituyen necesitan hacerse un aborto de vez en cuando, pese a los numerosos métodos anticonceptivos que podrían escoger" y que "la criminalización del aborto no disminuye su práctica". Esta controvertida mujer afirma, además, que actúa como humanista y cristiana, en defensa de las mujeres que se someten a un aborto "en situaciones difíciles y clandestinas".

Para la coordinadora de la PMM, "la mayor motivación para escribir este documento estuvo en haber convivido con una gran cantidad de mujeres que, en la prostitución, precisaban de someterse al aborto, uno, dos tres y hasta más de 20 abortos cada una".

Ferreira afirma también que "no aconsejo el aborto ni el uso de preservativo, estoy a favor de la planificación familiar lo más natural que sea posible, estoy de acuerdo con la Iglesia en todo, pero defiendo la vida de la mujer".

Por su parte, Mons. Luiz Demétrio Valentini, Obispo de Jales y responsable último de la PMM, subrayó que "posiciones radicales expresadas en torno a temas como el aborto corren el riesgo de comprometer la Campaña de Fraternidad, que será lanzada el próximo miércoles".

O Estado de Sao Paulo indica también que Ferreira podría ser expulsada de su cargo por su posición anti-vida. Este caso se suma a la posición de las autodenominadas Católicas por el Derecho a Decidir (CDD), el grupo abortista que participó originalmente en el DVD de la Campaña de Fraternidad 2008, invitado por la productora Verbo Filmes, la producción fue luego retirada de las librerías por orden de la CNBB para ser editado nuevamente, esta vez sin la participación de las CDD.