Tras citar las palabras del Papa Francisco pronunciadas en una reciente audiencia general en la que describió que los santos son "testigos que veneramos y que de mil maneras diferentes nos remiten a Jesucristo, único Señor y Mediador entre Dios y el hombre", la autoridad vaticana añadió que los nuevos beatos "se nos dan como modelos a seguir, pero también como intercesores a los que podemos acudir con confianza".
"Son modelos porque fueron dóciles a la gracia que obró en ellos. Son intercesores porque, como nos recuerda el Catecismo de la Iglesia Católica, "contemplan a Dios, lo alaban y no dejan de cuidar de aquellos que han quedado en la tierra (...) Su intercesión es su más alto servicio al plan de Dios. Podemos y debemos rogarles que intercedan por nosotros y por el mundo entero", explicó el Cardenal Semeraro.
Por ello, el Purpurado invitó a encomendarse "a la intercesión de los nuevos beatos, para que se encienda en nosotros el deseo de vivir como santos, porque, como nos recuerda una vez más el Papa Francisco, "en nuestra vida, aunque débil y marcada por el pecado, la santidad puede florecer".
Además, el Cardenal Semeraro destacó aspectos de la vida de cada uno de los nuevos beatos. Por ejemplo, dijo que el Cardenal Wyszyński, "como verdadero hijo de la tierra polaca, tenía realmente en su corazón una profunda devoción a la Santa Madre de Dios", por lo que bajo la mirada de la Virgen María "confió a Dios su propia vida y el destino de la nación polaca" y le enseñó "a vivir sólo para Dios y a complacerle sólo a Él, a través de su servicio pastoral diario".