Un integrante del grupo feminista Femen irrumpió este domingo en la Plaza de San Pedro, semidesnuda y con un niño en brazos para hacer una insólita demanda al Papa Francisco: que emita una "bula" con la que el Vaticano pueda "lavar parcialmente la vergüenza de siglos de persecución contra las mujeres".
La feminista apareció en la Plaza de San Pedro cuando los fieles se reunían para el rezo del Regina Coeli. Llevaba en brazos un bebé amamantando y en su cuerpo la frase "Alma Mater".
La mujer fue retirada por la gendarmería vaticana.