El Obispo de Santiago del Estero, Mons. Francisco Polti, señaló que uno de los principales factores que hacen que los jóvenes caigan en las drogas y el alcohol tiene que ver con la ausencia del amor en la familia, que genera un vacío muy grande que nunca va a ser poder llenado con esas sustancias adictivas.
En declaraciones al diario El Liberal, el Prelado explicó que si falta la vida familiar en la vida de un joven, si falta el amor, el joven cae en un profundo vacío moral y espiritual y aparece el riesgo de las adicciones, que no van a solucionar nada sin la familia, "porque la familia es elemento clave en la formación del carácter de una persona y de sus actitudes hacia la sociedad".
Asimismo, observó que en la actualidad hay un "preocupante aumento" de las salidas negativas ante las crisis matrimoniales y familiares, y que "existen carencias para ofrecer una educación integral para hacer frente a problemas comunes: falta de diálogo, falta de tiempo para compartir, el miedo a comunicar, el silencio, el consumismo, etc."