Tras un debate acalorado ocurrido el mes pasado, el Consejo de la ciudad de Phoenix rechazó el 2 de marzo por siete votos contra dos votos la propuesta del Templo Satanista de Tucson para que se reemplacen las oraciones en público por los momentos de silencio.
El concejal Sal Diciccio, un católico practicante que estuvo involucrado en el debate manifestó que esta decisión es "un gran triunfo para Phoenix".
"Lo que hemos pasado fue reinstaurar la invocación u oración en la ciudad de Phoenix. Lo hemos fortalecido más que nunca en sus 65 años de historia", dijo a ACI Prensa.