El estadio de Kerala, al sur de India, fue escenario ayer de un nuevo ataque contra los católicos. Esta vez, las víctimas fueron las religiosas de la congregación Misioneras de la Caridad –fundada por la Madre Teresa de Calculta- que recibieron sendos golpes cuando alimentaban a un grupo de pobres.
Según el periódico "The Hindu", las religiosas fueron agredidas por grupos de extremistas hindúes armados con barras de hierro, que las acusaban de evangelizar.
Cuatro religiosas, tres hermanos y dos choferes de la congregación fueron heridos en la cabeza. Hasta el momento hay 14 integristas hindúes detenidos por la policía en relación con los ataques.