Un estudio del Pontificio Consejo para la Cultura reveló que en el mundo aumenta la indiferencia religiosa y la fe en un "Dios sin rostro", al mismo tiempo que disminuye lo que se denomina "ateísmo activo".
"Las 300 respuestas a nuestro estudio demuestran un debilitamiento de la fe, tanto en el ateísmo como en la Iglesia, en la cultura occidental dominante, marcadas por una mezcla de racionalismo técnico y de hedonismo permisivo", señaló el Cardenal Paul Poupard, presidente del dicasterio vaticano que esta semana comienza su asamblea plenaria.
El Purpurado agregó que “Africa, Asia y también América latina, siguen siendo animadas por la religión popular en el corazón de las culturas".