El Papa Benedicto XVI destacó que las escuelas católicas italianas, "para ser escogidas y apreciadas" deben ser consideradas también como "una aportación valiosa a la edificación del bien común de toda la sociedad" del país.
Así lo expresó el Santo Padre al recibir esta mañana a los participantes del seminario "Más allá de la emergencia educativa, la escuela católica al servicio de los jóvenes", promovido por el Centro de Estudios para la Escuela Católica, de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI), con motivo del décimo aniversario de su fundación.
Tras recordar que el documento de la CEI titulado "La escuela católica hoy en Italia", que afirmaba que ésta era "expresión del derecho de todos los ciudadanos a la libertad de educación, y del correspondiente deber de solidaridad en la construcción de la convivencia civil", el Pontífice explicó que estas deben ser "conocidas en su intento pedagógico".