Los directivos de una escuela de Wisconsin reconsideraron su decisión y finalmente permitieron que la estudiante que logró el primer puesto de la clase hablara de Cristo en el discurso que ofreció en la ceremonia de graduación.
Cuando Miriam Cattanach, que obtuvo el primer puesto de su clase en el Spencer High School, envió su discurso para la ceremonia de graduación, los directivos de la escuela secundaria le exigieron que retirase toda referencia religiosa, a Jesús o a Dios, que pudiese haber incluido en el mismo.
Cuando los directivos censuraron el discurso –en el que la estudiante afirmaba que Cristo es la esperanza para el futuro– los familiares de Miriam se contactaron con el Liberty Counsel en Florida para explicarles lo sucedido. Luego de la intervención de este grupo de apoyo legal, el colegio cambió de parecer, según indicó el presidente de esa institución, Mat Staver.