La Conferencia Episcopal de Guatemala (CEG) rechazó las "disposiciones represivas e incriminatorias" dadas por la Unión Europea y los Estados Unidos "contra miles de indocumentados que en la clandestinidad aportan a la economía de los países de origen y destino".
"Rechazamos las redadas y deportaciones masivas" pues estas "actitudes de hostilidad y persecución no solucionan en nada la problemática migratoria" sino que son acciones contraproducentes e inhumanas", denuncia el Episcopado guatemalteco en un reciente comunicado emitido por su Pastoral de Movilidad Humana.
Tras indicar que como Iglesia "nos preocupan tales hechos padecidos por la comunidad inmigrante en dichas naciones", los Prelados aseguran que "urgen medidas gubernamentales necesarias para la reinserción de los trabajadores deportados" pues "hasta ahora las acciones del Gobierno no garantizan una estancia digna en nuestro país de los deportados", según informa la Agencia Fides.