Episcopado español aborda en Instrucción la secularización en la Iglesia

El Secretario General y Portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), P. Juan Antonio Martínez Camino, presentó a la prensa la Instrucción Pastoral “Teología y secularización en España. A los cuarenta años de la clausura del Concilio Vaticano II”, en la que los obispos orientan sobre doctrinas que perturban actualmente la fe y vida eclesial y abordan “las causas principales de la secularización interna de la Iglesia”.

La elaboración de la Instrucción, aprobada en la última Asamblea Plenaria de la CEE realizada del 27 al 31 de marzo pasado, fue encomendada a la Comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe y se remonta a septiembre de 2003. Ha sido estudiada y perfilada en las dos últimas Asambleas Plenarias, señaló el vocero de la CEE.

El documento episcopal “ofrece una palabra de orientación y discernimiento ante determinados planteamientos doctrinales, extendidos dentro de la Iglesia, y que han encontrado una difundida acogida también en España, perturbando la vida eclesial y la fe de los sencillos”.

Asimismo, según señala él mismo, trata de identificar una de las causas principales de la secularización interna de la Iglesia, señalando que en el origen de ésta se encuentra “la pérdida de la fe y de su inteligencia, en la que juegan, sin duda, un papel importante algunas propuestas teológicas deficientes”. Según el texto, estas propuestas se relacionan con la presentación deformada del Misterio de Cristo.

Propuestas teológicas deficientes

Sobre los elementos que entran en juego en las propuestas teológicas deficientes, la Instrucción señala una concepción racionalista de la fe y de la Revelación, un humanismo inmanentista aplicado a Jesucristo, una interpretación meramente sociológica de la Iglesia y un subjetivismo-relativismo secular en el campo de la moral.

Según el texto, estos planteamientos deficientes se hallan unidos por el abandono o el no reconocimiento de lo específicamente cristiano, en especial, del valor definitivo y universal de Jesucristo en su Revelación, su condición de Hijo del Dios vivo, su presencia real en la Iglesia y su vida ofrecida y prometida como configuradora de la conducta moral.

La Instrucción, aunque destinada a todos los fieles católicos, es de particular utilidad para todos aquellos que han recibido en la Iglesia la misión de enseñar en su nombre, señaló el sacerdote.

Para leer la Instrucción Pastoral completa puede visitar: http://www.conferenciaepiscopal.es/documentos/Conferencia/teologia.htm