La Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE) precisó que la nueva Constitución del país, que aún debe someterse a referéndum, considera, entre otros puntos anti-vida y anti-familia una "manifiesta aceptación del aborto, perversión de la institución familiar, sofocante totalitarismo estatal en materia de educación" y "restricciones a la libertad religiosa".
En un encuentro con miembros de la Fundación Familia y Futuro, Mons. Antonio Arregui, Arzobispo de Guayaquil y Presidente de la CEE explicó algunos de los puntos del documento que presentarán el próximo lunes 28 de julio ante la nueva Constitución y precisó que "no nos corresponde, como Obispos, liderar una campaña por el No en actitud política" ante el próximo referéndum.
"Nos corresponde, en cambio, iluminar las conciencias de los católicos con la doctrina del Evangelio, para que tomen una decisión responsable y en conciencia, ante Dios y ante la sociedad", subrayó el Prelado.