El Presidente del Pontificio Consejo Cor Unum, Arzobispo Paul Josef Cordes, acudió a la zona de desastre del huracán Katrina, en el sudeste de Estados Unidos, para expresar la solidaridad del Papa Benedicto XVI y de la Iglesia toda con las víctimas de la tragedia.
La declaración oficial del Pontificio Consejo afirma que "la misión del enviado papal, además de portar un signo de cercanía espiritual y material de Benedicto XVI, también busca alentar a las instituciones católicas involucradas con la ayuda en la zona de emergencia, además de contribuir y promover la reconstrucción de la misma”.
El sábado 10, Mons. Cordes se reunió con el Obispo de Baton Rouge (Louisiana), Mons. Robert Muench y con el Padre Larry Snyder, Presidente de Catholic Charities U.S.A – institución que viene prestando ayuda a los damnificados–; ofreciendo asistencia con medios provenientes también del Vaticano.