Durante una Eucaristía celebrada en el límite entre Ciudad Juárez y Sunland Park, Nuevo México, el Obispo local, Mons. Renato Ascencio León, pidió “por los fieles difuntos” muertos “en su intento de cruzar la frontera” y recordó que “Dios nunca puso barreras a los peregrinos de ningún tipo”.
“El objetivo de esta Misa celebrada al mismo tiempo en el lado estadounidense y mexicano, en inglés y español, es pedir por los fieles difuntos que han perdido la vida en su intento de cruzar al vecino país en busca de trabajo”, manifestó el Prelado.
Asimismo, indicó que “Dios nunca puso barreras a los peregrinos de ningún tipo”. Además pidió que se respeten los derechos humanos de quienes “intentan cruzar en busca de mejores condiciones de vida”.