En una Misa de acción de gracias en el campamento Esperanza en las afueras de la mina San José con 20 de los mineros rescatados y sus parientes, el Vicepresidente de la Conferencia Episcopal de Chile, Mons. Gonzalo Duarte, resaltó la importancia vital de la familia dentro de la sociedad.
En la Eucaristía de ayer, el Prelado agradeció el ejemplo de fortaleza, solidaridad, de unidad y de ganas de vivir de los mineros y de las familias, señalando que "la familia es el mejor lugar para nacer, para crecer, para envejecer y para morir", resaltando la importancia de que los familiares permanecieran en el campamento durante los 70 días que duró el encierro de los 33 mineros bajo el yacimiento.
Asimismo, señala la nota de prensa de la Oficina de Comunicaciones de la diócesis de Copiapó, el Obispo, dio las gracias de manera especial a las madres y las abuelas, que son "la columna vertebral" del país.