En un sentido mensaje de pésame enviado a las autoridades rusas por las “víctimas inocentes” de la matanza de la escuela de Beslán en Osetia del Norte, el Papa Juan Pablo II auguró que no prevalezca “la espiral del odio y de la violencia”.
En el telegrama enviado por el Cardenal Angelo Sodano, Secretario de Estado a nombre del Santo Padre, señala que “conocida la noticia del cruento epílogo del feroz secuestro en Osetia del Norte, con vil y despiadada agresión contra niños y sus familias indefensas” el Papa expresa su solidaridad y eleva sus oraciones por las víctimas, los heridos y sus familiares.
El Pontífice hace también partícipe de su “afecto al pueblo ruso en esta hora de angustia” y señala su “rechazo a toda forma de terrorismo”, con la esperanza de que “no prevalezca la espiral del odio y de la violencia” en Rusia y en la región chechena.