Al presidir la tradicional misa cotidiana en la capilla de la Casa Santa Marta en la que reside, a la que acudieron empleados de las embajadas y consulados de la Argentina en Italia y en la FAO, el Papa Francisco dijo hoy que "desde el 26 de febrero que no celebraba la Misa en español".
"Me ha hecho mucho bien", reconoció, antes de agradecer a los funcionarios diplomáticos lo que hacen por el país.
El Pontífice pidió a los presentes que tengan cuidado con lo que dicen sobre los demás y les advirtió que no se debe insultar, porque "el insulto es una forma de denigrar al otro".