El Papa Benedicto XVI comenzó su día de manera usual durante la JMJ Sydney 2008: con sus oraciones de la mañana y su inspirador mensaje de texto para todos los peregrinos.
“El Espíritu nos impulsa hacia los otros, el fuego de su amor nos hace misioneros de la caridad de Dios. Nos vemos mañana en la tarde – BXVI".
El mensaje fue enviado antes de reunirse con los líderes cristianos y los líderes de otras religiones.