El Papa Francisco se ha solidarizado con las víctimas del voraz incendio forestal, iniciado el sábado 17 en Portugal, que ya ha causado 58 muertos y 60 heridos.
Tras el rezo del Ángelus en la Plaza de San Pedro, el Santo Padre expresó "mi cercanía al querido pueblo portugués por los incendios devastadores que están golpeando los bosques del entorno de Pedrógão Grande causando numerosas víctimas y heridos".
El fuego, que según el Gobierno portugués se originó como consecuencia de la caída de un rayo, continúa activo. La ola de calor intenso que está afectando a la península ibérica, y a otras regiones europeas desde hace días, dificulta las tareas de extinción y está facilitando su rápida propagación.