Poco antes de partir de regreso a Roma el lunes por la mañana, el Papa Benedicto XVI se reunió en privado en la residencia de la Catedral de Saint Mary en Sydney con un grupo de víctimas de abusos sexuales de sacerdotes católicos australianos.
Según informó el P. Federico Lombardi, Director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, el Santo Padre se reunió con ellos en un diálogo de una hora que siguió a una Misa privada celebrada para ellos.
Durante la reunión, explicó el P. Lombardi, el Pontífice “escuchó sus historias y les consoló. Les reiteró su proximidad espiritual y les ofreció continuar orando por ellos, por sus familias y por todas las víctimas”.