3 de febrero de 2020 / 01:19 PM
El Papa Francisco destacó cómo la Iglesia se convirtió en un refugio para los judíos romanos perseguidos por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.
Lo hizo mediante un mensaje que el Secretario de Estado del Vaticano, Cardenal Pietro Parolin, leyó este lunes 3 de febrero en el Teatro de la Ópera de Roma con motivo de la celebración del 150 aniversario de la declaración de Roma como capital de la Italia reunificada.
El Santo Padre, que es Obispo de Roma, señaló que "la proclamación de Roma Capital fue un evento providencial que, entonces, suscitó polémicas y problemas. Pero cambió Roma, Italia y la misma Iglesia: se iniciaba una nueva historia".