12 de mayo de 2008 / 08:51 AM
Al recibir las cartas credenciales de Mordechay Lewy, nuevo Embajador de Israel ante la Santa Sede, el Papa Benedicto XVI reconoció el derecho de Israel a la autodefensa; pero pidió más apoyo a las oprimidas minorías cristianas.
Luego de presentar sus augurios con motivo de la celebración de los 60 años de Israel como estado; señaló que espera que "llegue pronto el tiempo de alegrarse aún más cuando una paz justa resuelva finalmente el conflicto con los palestinos".
El Papa enumeró después los diversos sectores de interés mutuo para la Santa Sede y el estado de Israel, subrayando que "la herencia judeocristiana debe inspirarnos para encabezar la promoción de múltiples formas de actividades sociales y humanitarias en todo el mundo, entre otras la de luchar contra cualquier forma de discriminación racial".