El día de hoy ante miles de fieles reunidos en Plaza San Pedro, terminado el rezo del Ángelus dominical, el Papa Benedicto XVI definió la lepra como un síntoma de la miseria y pidió que se le ponga fin.
Tras recordar la celebración de la Jornada mundial de los enfermos de lepra y dirigir “un saludo especial a cuantos sufren de esta enfermedad” y “alentar a los misioneros, operadores sanitarios y voluntarios comprometidos”, el Santo Padre afirmó que “la lepra es síntoma de un mal más grave y más vasto, que es la miseria”.
Asimismo Su Santidad exhortó a que los “responsables de las Naciones, unan los esfuerzos para superar los graves desequilibrios que aún penalizan a gran parte de la humanidad”.