Al presidir el rezo del Ángelus Dominical, el Papa Benedicto XVI recordó la conmemoración de todos los fieles difuntos haciendo un llamado a evangelizar la realidad de la muerte y la vida eterna para que la verdad cristiana no se mezcle con “mitologías de varios géneros”.
“Hoy con el alma dirigida a esta realidad última conmemoramos a todos los fieles difuntos que nos han precedido con el signo de la fe y duermen el sueño en paz”, señaló el Papa y subrayó la importancia de que los cristianos “vivamos la relación con los difuntos en la verdad de la fe, y miremos a la muerte y al más allá en la luz de la revelación”.
“Es necesario también hoy evangelizar la realidad de la muerte y de la vida eterna, realidad especialmente sujeta a creencias supersticiosas y a sincretismos, para que la verdad cristiana no arriesgue mezclarse con mitologías de todo tipo”, señalo el Pontífice.