En el único encuentro público programado durante los 12 días de vacaciones en el norte de Italia, el Papa Juan Pablo II hizo un elogio de la importancia del silencio en la vida del cristiano durante el Angelus rezado en Las Combes
“En este oasis de tranquilidad”, dijo el Pontífice refiriéndose a la zona boscosa a los pies de los Alpes donde descansa, “ante el maravilloso espectáculo de la naturaleza, se experimenta fácilmente lo provechoso que es el silencio, un bien que hoy es cada vez más raro”.
El Santo Padre señaló que “las numerosas oportunidades de relación y de información que ofrece la sociedad moderna traen en ocasiones el riesgo de quitar espacio al recogimiento, hasta hacer que las personas sean incapaces de reflexionar y rezar”.