El Papa Francisco se convirtió en el primer líder mundial que da visibilidad a la enfermedad de Huntington, un trastorno cerebral genético incurable, en una histórica y emotiva audiencia con cientos de familias afectadas por esta condición.
Entre los asistentes estaba Brenda, una joven de 15 años proveniente de Buenos Aires, Argentina, quien padece de esta enfermedad desde los 10 años.
Brenda fue escogida para entregar al Papa Francisco un manifiesto en nombre de los enfermos presentes, quienes muchas veces sufren discriminación y malos tratos, razón por la que algunos deciden ocultar su condición a la sociedad e incluso a su familia.