El Papa Francisco tuvo un encuentro privado con el presidente de Israel, Shimon Peres, tras el cual pronunció un discurso en el que renovó su llamado a rechazar cualquier uso de la violencia y más bien recurrir a los puntos que unen a los judíos, cristianos y musulmanes para "proseguir en el empeño por una solución pacífica de las controversias y los conflictos".
"Usted es conocido como un hombre de paz y artífice de paz. Le manifiesto mi reconocimiento y mi admiración por esta actitud", expresó el Papa al líder israelí.
Francisco recordó que "la construcción de la paz exige sobre todo el respeto a la libertad y a la dignidad de la persona humana, que judíos, cristianos y musulmanes consideran igualmente creada por Dios y destinada a la vida eterna". "A partir de este punto de referencia que tenemos en común –afirmó-, es posible proseguir en el empeño por una solución pacífica de las controversias y los conflictos".