En un telegrama enviado al Arzobispo de Nueva York, Cardenal Edward Egan, el Papa Benedicto XVI expresó sus condolencias y elevó sus oraciones por el alma del Cardenal Avery Dulles, fallecido en esta ciudad estadounidense ayer por la mañana a la edad de 90 años.
En el breve texto, el Papa señala que "habiendo conocido con tristeza de la muerte del Cardenal Avery Dulles, le ofrezco mis más sentidas condolencias, que le pido usted transmita a su familia, sus hermanos de la Compañía de Jesús y a la comunidad académica de la Fordham University".
Seguidamente, Benedicto XVI señaló que se une al Cardenal Egan "al encomendar el alma del noble Cardenal (Dulles) a Dios, el Padre de la Misericordia, con inmensa gratitud por el profundo aprendizaje, juicio sereno y amor incansable al Señor y a su Iglesia que marcaron todo su sacerdocio y sus largos años de enseñanza e investigación teológica al tiempo que rezo para que su convincente testimonio personal sobre la armonía de la fe y la razón sigan dando frutos para la conversión de las mentes y corazones y el avance del Evangelio durante muchos años más".