El Papa Benedicto XVI alentó a los católicos a rezar confiando siempre en la voluntad amorosa de Dios que siempre escucha las oraciones de sus hijos aunque a veces "pudiera parecer" lo contrario. Así lo indicó en la audiencia general de este miércoles en el Aula Pablo VI en el Vaticano.
Ante miles de fieles reunidos provenientes de diversas naciones del mundo, el Santo Padre meditó sobre la oración de Jesús en la que pide la curación de las enfermedades. Para eso se centró en los episodios del sordomudo y la resurrección de su amigo Lázaro.
El Papa dijo que la curación del sordomudo nos muestra que "la acción curativa de Jesús está en estrecha relación con el prójimo y con el Padre. Con un gesto, el Señor toca las orejas y la lengua del enfermo, o sea, donde se aloja la enfermedad. Pero el punto central de este episodio es el hecho de que Jesús, en el momento de curar, busca directamente la relación con el Padre", elevando su mirada al cielo.