En una carta dirigida al Arzobispo de Burdeos y Presidente de la Conferencia Episcopal Francesa, Cardenal Jean-Pierre Ricard, con motivo del primer centenario de la apertura del primer campamento de scouts, el Papa Benedicto XVI recordó la figura del fundador del escultismo católico, el P. Jacques Sevin, S.I. y destacó el valor y vigencia de la pedagogía que ofrece este movimiento.
El primer campamento de scouts se abrió el 1 de agosto de 1907 en la isla de Brownsea (Reino Unido). Posteriormente, tras la Primera Guerra Mundial, el sacerdote jesuita fundó el escultismo católico.
Al destacar que el ideal de ser constructores de la paz y las riquezas de los valores que caracterizan a los scouts, se reforzaron afianzándose en el Evangelio, el Pontífice señala en la misiva que el escultismo no es solo un lugar de crecimiento humano verdadero, sino también una propuesta cristiana y un impulso real para la maduración espiritual y moral, así como un auténtico camino de santidad, como alentaba, el P. Sevin.