En el Mensaje para la Cuaresma de este año, el Papa Francisco clama contra los "encantadores de serpientes" que "aprovechan de las emociones humanas para esclavizar a las personas y llevarlas adonde ellos quieren".
En el texto, presentado en la Oficina de Prensa de la Santa Sede por el Cardenal Peter Turkson, Prefecto para el Dicasterio para el Desarrollo Humano integral, y Natalia Peiró, Secretaria de Cáritas España, el Papa se pregunta "cuántos hijos de Dios se dejan fascinar por las lisonjas de un placer momentáneo, al que se le confunde con la felicidad".
"Cuántos hombres y mujeres viven como encantados por la ilusión del dinero, que los hace en realidad esclavos del lucro o de intereses mezquinos. Cuántos viven pensando que se bastan a sí mismos y caen presa de la soledad", dice también en el texto.