23 de mayo de 2005 / 11:28 AM
En una carta dirigida a los Obispos españoles con motivo de la peregrinación anual al santuario del Pilar de Zaragoza, el Papa Benedicto XVI destacó el esfuerzo de la Iglesia en España por promover el bien común y pidió que su accionar sea comprendido y aceptado.
Los Obispos españoles peregrinaron el pasado sábado al Pilar para celebrar el 150 aniversario de la proclamación del dogma de la Inmaculada Concepción y el 50 aniversario de la consagración de España al Inmaculado Corazón de María.
“María Inmaculada –escribe Benedicto XVI en la carta fechada el 19 de mayo– refleja la misericordia del Padre. Concebida sin pecado, fue capaz de perdonar también a quienes abandonaban y herían a su Hijo al pie de la cruz. Como Abogada nos ayuda en nuestras necesidades e intercede por nosotros ante su Hijo”.