23 de marzo de 2010 / 12:30 AM
El Presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, Cardenal Angelo Bagnasco, destacó que con su Carta Pastoral a los católicos de Irlanda dada a conocer el sábado, el Papa Benedicto XVI enseña a no tenerle miedo a la verdad ante los abusos sexuales a menores cometidos por algunos miembros del clero. Asimismo resaltó su firme decisión de enfrentar este tema sin excusas ni encubrimientos.
El también Arzobispo de Génova hizo estas declaraciones al iniciarse en Roma el consejo de la Comisión Permanente de la CEI que culminará el jueves 25 de marzo. El Purpurado destacó que "cuanto más, desde cualquier parte, se intenta manchar su limpia y amable persona, tanto más el pueblo de Dios lo ve (al Papa) con emoción y orgullosos. También por esto le renovamos nuestra cercanía más fuerte y grata, el afecto profundo y nuestra plena y concreta comunión".
"Dirigiendo el sábado su Carta a los Católicos de Irlanda y afrontando con ellos a corazón abierto el problema, doloroso allí donde se verifica, de los abusos sexuales cometidos contra menores por eclesiásticos –crimen odioso y pecado escandalosamente grave que traiciona el pacto de confianza inscrito en la relación educativa– el Papa ha colocado un límite insuperable a la perniciosa tendencia de buscar excusas en atenuantes y condicionamientos", dijo el Cardenal.