20 de marzo de 2006 / 09:21 AM
Al recibir a Su Beatitud Nerses Bedros XIX Tarmouni, patriarca de Cilicia de los Armenios (Líbano) y un grupo de peregrinos; el Papa Benedicto XVI alentó al diálogo ecuménico con los Armenios no católicos, que lleve a su total unidad en torno al primado de Pedro.
La comunidad cristiana armenia, –presente principalmente en Turquía, Armenia y Azerbaiyán– está dividida en una minoría católica y una mayoría que no reconoce el Primado de Pedro.
En su discurso, el Santo Padre recordó los sufrimientos del pueblo armenio a lo largo de los siglos y en concreto, los padecidos “en nombre de la fe cristiana, en los años de la terrible persecución conocida con el nombre tristemente significativo de ‘metz yeghèrn’ ‘el gran mal’”; término que utilizan los Armenios para referirse especialmente al genocidio de millones de cristianos lanzado por el moribundo imperio otomano (turco) a principios del siglo XX.