El Papa Francisco alentó este 17 de febrero a ser "artesanos y protectores" de la belleza porque la belleza es siempre "una fuente de alegría".
Así lo indicó el Santo Padre durante la audiencia a algunos miembros de la asociación Diaconie de la beauté, un movimiento nacido en 2012 a raíz del Sínodo sobre la Nueva Evangelización que reúne a músicos, poetas, pintores, arquitectos, cineastas, escultores, actores y bailarines.
En su breve discurso, el Papa reconoció que "en el difícil contexto actual del mundo, en el que el desconcierto y la tristeza parecen a veces tener la sartén por el mango", la misión de difundir la belleza es "más necesaria que nunca, porque la belleza es siempre una fuente de alegría, que nos pone en contacto con la bondad divina".