26 de julio de 2018 / 07:24 AM
Hace dos años, dos jóvenes pertenecientes al Estado Islámico irrumpieron en la iglesia de Saint Etienne du Rouvray, en Rouen, Francia, y asesinaron de forma despiadada al P. Jacques Hamel mientras celebraba la Misa.
Este jueves 26 de julio, la Diócesis de Rouen conmemora el segundo aniversario del martirio de su sacerdote que, en opinión de su postulador, P. Paul Vigoroux, ya ha generado frutos espirituales, como la unión de las comunidades y el entendimiento entre las religiones.
Al grito de "Allahu akbar", ("Dios es grande", en árabe), los dos yihadistas accedieron al interior de la iglesia y comenzaron a destruir imágenes religiosas. El sacerdote intentó evitar la tragedia: "Pero, ¿qué hacéis? ¡Tranquilizaos!", les dijo según afirman los testigos. De nada sirvió. Los terroristas quisieron obligar al sacerdote a ponerse de rodillas, pero él se negó.