Este abogado, que estaba titulado en La Sorbona de París y en la Complutense de Madrid, explica su hermano Joaquín, "era muy metódico y constante. Que hablaba cuatro idiomas, español, francés, inglés, alemán, y todos con alto nivel; cuando no estaba con amigos o con familia, estudiaba idiomas".
Rafael Duarte, otro de sus amigos que trabajó con él en el Banco Popular, afirma que Ignacio "era un trabajador infatigable y no dudaba en enfrentarse a los jefes si algo no le gustaba".
Ignacio era sobrino del fallecido Obispo de Chachapoyas, en la selva del Perú, Mons. Antonio Hornedo, quien pastoreó esa diócesis entre 1977 y 1991, cuyo ejemplo era importante para la familia Echeverría.
Un amigo suyo dijo al diario español La Razón que una vez, cuando era más joven, en una playa cantábrica de San Vicente de la Barquera con el mar embravecido, "Ignacio se metió nadando a por su hermano, que no sabía cómo volver a la playa; Ignacio era un nadador excepcional y le sacó, pero después tuvo que reconocer que casi se ahoga durante el rescate".