Los ecónomos diocesanos se reunieron el 15 de octubre en la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) para evaluar las herramientas de sostenimiento de la Iglesia local.
En noviembre de 2018 los obispos de Argentina anunciaron la renuncia gradual a los aportes del Estado. Esto luego de la polémica desatada por la asignación de un presupuesto de 130.421.300 pesos argentinos (unos 6,5 millones de dólares) de parte del gobierno a la CEA.
En ese contexto, la Comisión para el Sostenimiento de la Acción Evangelizadora de la Iglesia convocó a los representantes de 52 diócesis para definir criterios para un fondo común solidario.