La Comisión de los Episcopados de la Comunidad Europea (COMECE) crítico duramente un proyecto de la directiva de la Unión Europea que busca proteger a los animales en investigaciones científicas, pero que dejaría desprotegidos y totalmente disponibles para experimentar con ellos a los embriones humanos.
En un comunicado dado a conocer por L’Osservatore Romano, los prelados de Europa señalan que "los experimentos realizados a partir de células estaminales embrionarias humanas no deben ser considerados una alternativa a los experimentos con animales. Existe el peligro de cancelar la diferencia entre animal y ser humano".
Los obispos, que han alabado el proyecto para defender a los animales, expresan sin embargo su total oposición a que los embriones humanos queden desprotegidos y sean usados para experimentos: "para defender a los animales, el texto actual establece que, cuando sea posible, será necesario usar un método o una estrategia de experimentación científicamente satisfactoria que no implique el uso de animales vivos. Esta fórmula muy general permitiría, por ejemplo, introducir experimentos que utilicen células estaminales embrionarias humanas".