El Obispo Auxiliar de Buenos Aires y Vicario de la Pastoral de Niños, Mons. Eduardo Horacio García, señaló la importancia de la Misa Arquidiocesana de Niños celebra el último fin de semana, ya que ellos “no son el furgón de cola” sino el “presente que hoy Dios nos confía para que los ayudemos a que desplieguen todo su potencial de vida y de fe”.
El Prelado se refirió así en una entrevista concedida a la agencia argentina AICA. Tras señalar que la propuesta de realizar un encuentro masivo de niños “surge en 1987 al tratar de dar a los chicos un espacio y un lugar diferente dentro de la Iglesia”, Mons. Horacio recordó que ellos aportan “a la vida de la Iglesia todo lo que sólo ellos pueden brindarle: espontaneidad, frescura, alegría, simplicidad, ternura”.
“Los niños, por naturaleza, son activos, vitales, alegres, explosivos, espontáneos. Jesús confía muchísimo en los niños, porque sabe que consiguen lo que se proponen. Cristo los pone en medio y los acaricia porque son débiles, confiados y receptivos. También porque encarnan los valores evangélicos esenciales”, agregó.