8 de agosto de 2005 / 06:29 PM
Convocados por su Pastor, Mons. Orlando Romero, la diócesis de Canelones ofreció el pasado fin de semana una jornada de oración por la santificación de los sacerdotes.
Recordando la fiesta de San Juan María Vianney, patrono de los párrocos y sacerdotes diocesanos, los fieles hicieron eco a las intenciones del Papa Benedicto XVI, quien aquel día hizo también referencia al Santo Cura de Ars como modelo para la santidad de los sacerdotes.
Mons. Romero exhortó a los presbíteros, así como a las comunidades parroquiales y religiosas de su Diócesis, a vivir la santidad porque “a nadie escapa la necesidad de ser santos, ya que la ‘voluntad de Dios es nuestra santificación’. Si la santidad es un llamado universal con cuánta mayor exigencia para quienes son los servidores de Cristo y administradores de los misterios de Dios (1ª Cor, 4,1) llamados a ser santos en toda su conducta, de acuerdo a los que está escrito: ‘Sean santos porque yo soy santo ( 1ª Pe. 1, 15-16)’”.